VICTOR MANUEL TREVIÑO ESCUDERO

Cónsul General de México en Montreal

Víctor Manuel Treviño Escudero ha sido Cónsul General de México en Montreal, Quebec, desde el 22 de marzo de 2024.

Es diplomático de carrera del Servicio Exterior Mexicano desde mayo de 1982.

Desde 2016 hasta 2024, fue Embajador de México ante la República Democrática Federal de Etiopía y en forma concurrente, sujeto a la recepción de los beneplácitos correspondientes, ante la Unión Africana, la República de Djibouti, la República Democrática del Congo, Somalia y Sudán del Sur. De agosto de 2013 a agosto de 2016, se desempeñó como Jefe de Misión Adjunto en la Embajada de México en Australia.

De 2010 a 2013, fue Cónsul General de México en Phoenix, Arizona, donde supervisó administrativamente los consulados en Tucson y Yuma. Anteriormente fue Cónsul en Jefe en Brownsville, Texas, de 2005 a 2010.

De agosto de 2000 a mayo de 2005, fue Cónsul Adjunto en el Consulado General de México en El Paso, Texas y de agosto de 1998 a agosto de 2000 fue Cónsul Adjunto en el Consulado General de México en Los Ángeles, California.

Trabajó en la Secretaría de Relaciones Exteriores como Director Adjunto de la Dirección General de Fronteras, de 1993 a 1994; como Director Regional de la Dirección General de América Latina y el Caribe, de 1994 a 1995; y como Asesor del Subsecretario para América del Norte, de 1996 a 1997.

Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma Metropolitana y posee una Maestría en Comando Superior y Seguridad Nacional por el Centro de Estudios Navales Avanzados (1995-1996), así como estudios de posgrado en Seguridad Continental en el Colegio Interamericano de Defensa en Washington, DC (1997-1998).

Realizó cursos de política exterior en el Instituto Matías Romero de la Secretaría de Relaciones Exteriores (1990-1991) y cursos para diplomáticos en el Instituto Rio Branco de Brasilia, Brasil (1994). Fue profesor de Relaciones Internacionales y Asuntos Fronterizos en la Universidad Autónoma de Baja California, en Mexicali, (1987-1989).

Está casado con Gabriela Cortes, con quien tiene dos hijos.

Es miembro activo de la Asociación Mexicana del Servicio Exterior (ASEM).

 

 

         

El Consulado General de México tiene como su más alta prioridad el apoyo y la protección, así como los procesos de mejor asimilación para su desarrollo, de todo mexicano  que se encuentre en la jurisdicción que comprenden las provincias canadienses de Quebec, New Brunswick, Nueva Escocia, La Isla del Príncipe Eduardo, Terranova y Labrador, y el territorio de Nunavut. 

Somos un equipo dedicado a ofrecer documentación, servicios consulares, protección y asesoría, servicios comunitarios y difusión y promoción en las áreas más dinámicas de las relaciones de México con Canadá como son el comercio y las inversiones, la cultura, las actividades académicas, el turismo y el manejo de prensa.

Nos une una vocación de servicio hacia nuestra comunidad y valoramos la relación de México con las sociedades de Quebec y las Provincias Atlánticas como una fuente de  oportunidades. Con la entrada en vigor del T-MEC y la existencia del CPTPP, así como la larga tradición de contactos económicos, culturales, académicos y sociales que han caracterizado una excelente relación de México con estas provincias, trabajamos para que nuestra región de América del Norte sea sinónimo de prosperidad y los mexicanos nos sintamos orgullosos de nuestra constante interacción con la gente maravillosa de esta parte del mundo. 

Historia del Consulado de México en Montreal 

El consulado general de México en Montreal es uno de los más antiguos de México. Desde 1888 nuestro país ya tenía un consulado honorario en esta ciudad que se consideraba una de las puertas de entrada a América del Norte por estar estratégicamente en la desembocadura del río San Lorenzo y cuando esta región del mundo se distinguía por un reconocido auge industrial y mercantil, particularmente por la producción de pieles, madera y papel, así como diversos productos industriales. Una infraestructura de canales conectaba desde este punto con los llamados grandes lagos y desde ahí hasta los ríos Ohio y Mississippi. 

Con la Revolución Mexicana se perdió el contacto con ese consulado honorario, pero pronto, en 1931 se abrió la primera representación de México en todo Canadá, este Consulado general, que desde un inicio reconoció las peculiaridades económicas, cultuales y sociales de la región heredera de la Nueva Francia.

El estilo diferenciado de la cultura de Quebec ha hecho que México le otorgue una importancia especial a su representación consular, trascendiendo las actividades comunes de documentación y asuntos del derecho privado entre naciones amigas, para encaminarse por una relación política fuerte y un despliegue sin paralelo de las fortalezas culturales y de cooperación que caracterizan a México en sus relaciones. De ahí que quebequenses y mexicanos hablen de ser las dos culturas latinas de Norte América.

Montreal, después de un proceso intenso de transformación en la segunda parte del siglo XX, se abrió al mundo con dos eventos únicos: la exposición universal de 1967 (donde México estuvo presente con un vistoso pabellón que exponía la longevidad y modernidad de la cultura mexicana), y los Juegos Olímpicos de 1976. Vuele a sentirse un paralelo entre México y Quebec con eventos igualmente globales que México organizó en esa época: los Juegos Olímpicos de 1968 y el mundial de futbol de 1970. También el proceso de nacionalización del sector eléctrico en Quebec, con la creación a mediados de los años sesenta, de la gran empresa estatal HydroQuebec, un baluarte vanguardista en la producción hidroeléctrica, coincide con muchos procesos de modernización de ese sector en México.

Muchas figuras quebequenses del arte comenzaron a ver en México una fuente de inspiración, como el famoso pintor René Deroin. Y los artistas mexicanos no dejaron de pensar igualmente en que, al hablar de desarrollo artístico, Montreal siempre ha competido con Nueva York en calidad, ingenio e innovación.

Con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, la interacción con Quebec se detona de manera muy dinámica. Muchas empresas quebequenses se enfocan hacia las oportunidades que México ofrece. Hay cercanía en el desarrollo de procesos más sofisticados y, poco a poco, los sectores de la aeronáutica, la minería, las manufacturas avanzadas y más recientemente las industrias culturales y de innovación marcan la pauta en la relación. Muchos profesionales mexicanos se han incorporado a la pujante industria quebequense en estos y otros sectores, distinguidos por una especial capacidad de asimilación, no exenta de sus complejidades, a la cultura latina y francófona de la provincia.

El sentido de innovación y creatividad que caracteriza a Montreal, detonado a finales del siglo XX con la industria del videojuego, pronto alimentó el desarrollo de las mejores tecnologías de la información, animación, gráficos, sonorización, industria del entretenimiento y, últimamente, investigaciones de vanguardia en materia de inteligencia artificial. Ello ha motivado que algunas empresas mexicanas busquen detonar su talento en esta ciudad, ciudad del ingenio. Al seleccionar espacios y ecosistemas con ventajas para la incubación y aceleración de empresas, México siempre ha puesto a Montreal y a toda la provincia de Quebec como una de sus prioridades.

El consulado se mantiene respondiendo a esta intensa relación; ha reconocido que el turismo quebequense en México es uno de los más importantes y que es difícil encontrar un ciudadano de la provincia que no guarde un bello recuerdo de alguna estadía en los destinos, las playas y los centros de cultura mexicanos.

Los cónsules generales en Montreal han sido activos promotores de temas de cooperación. Impulsan los intercambios de académicos y asistentes de idiomas, del sistema conocido como Grupo de Trabajo México.